El acto tuvo lugar este miércoles a las 16:30 hs. y estuvo presidido por el Intendente Pedro Galimberti. El paseo se encuentra ubicado frente al Colegio San José de nuestra ciudad.
El Intendente estuvo acompañado por el Presidente del HCD Marcelo Borghesan; la Directora Municipal de Educación Fabiola Fochesatto Brunini; junto a las Directoras de las Instituciones Educativas de la Congregación: Profesoras Marcela Comparín, María Cristina Pozzi, Diana Salini y Silvina Hartwig; y la Hermana Ana Sack.
Además, la ceremonia contó con la presencia de la Diputada Provincial Gabriela Lena; el Senador Miguel Piana; la Directora Departamental de Escuelas Stella Maris González; integrantes del Concejo Deliberante y miembros del Gabinete Municipal; docentes, ex docentes, y alumnos.
Al tomar la palabra, el Intendente Pedro Galimberti saludó a los presentes, destacando el gran número de alumnos participantes "que nos obligan no sólo a ir haciendo cosas en el presente, sino pensando un poco en el futuro en lo que viene".
También agradeció y destacó el trabajo del Concejo Deliberante Local "que han sancionado sobre tablas y de manera unánime instituyendo el nombre a este paseo".
Al referirse puntualmente a la Congregación, Galimberti puso en valor "la acción desarrollada en el tiempo de una Institución, de un hito fundamental como ha sido toda la Congregación de las Hermanas Franciscanas de Gante aquí en nuestra ciudad. Estamos muy cerca de cumplir los 100 años desde que se han instalado aquí muchos años atrás, donde seguramente la tarea, no sólo la evangelizadora sino también la de la educación tenían, y lo siguen teniendo en la actualidad, una importancia extrema. Todas estas razones han llevado a que hoy estemos inaugurando aquí este paseo", expresó.
"Es importante para nosotros como comunidad pero también es importante para toda la congregación, porque en definitiva aquí está parte de la historia de ellos pero también está parte de la historia de Chajarí", concluyó.
También hicieron uso de la palabra la Hermana Ana Sack y la Rectora del Instituto de Formación Docente Silvina Hartwig, quien agradeció al Municipio "porque siempre encontramos una puerta abierta" y destacó el trabajo que hace el Instituto desde hace 45 años.
La bendición de la plazoleta estuvo a cargo del Padre Aníbal Aguilera, luego de lo cual se procedió al habitual corte de cintas.
La Congregación Religiosa Hermanas Franciscanas de Gante se instaló en Chajarí en el año 1919. En 1920 se comenzó con la construcción del Colegio San José, donde empezó la escuela inicial, luego la escuela primaria hasta llegar a la Institución educativa que es hoy, base para esta enorme misión educativa y social que llevaron a cabo las hermanas en la región.
La Comunidad Educativa de las Hermanas de Gante está formada en la actualidad por la Escuela Manuel Belgrano, la Virgen Peregrina, el Instituto San José, y el Instituto de Formación Docente.
Este paseo, ubicado en el cantero central de la avenida 9 de Julio, frente al Establecimiento Educativo, se inscribe en el plan de mejoramiento de los espacios públicos que se viene llevando adelante desde el Gobierno de la ciudad, donde también se ubicó un punto histórico.
De esta manera se ha puesto en valor el espacio donde se restauró el antiguo monolito ubicado en el lugar con la frase “Que la paz prevalezca en la tierra” escrito en cuatro idiomas diferentes: Español, italiano, portugués y guaraní. En el lugar se ha construido una senda peatonal, se agregó una escultura, además de la iluminación y el embellecimiento del espacio verde.
Hermanas de Gante. De Bélgica a Chajarí
La Congregación Religiosa Hermanas Franciscanas de Gante, fue fundada en 1715 por Juana Teresa Cromben, en la localidad de Gante en Bélgica.
Las primeras seis Hermanas llegaron a nuestro país en el año 1893 por pedido de Monseñor Teófilo Van Damme oriundo de Bélgica que se encontraba en Entre Ríos. Fue así que primeramente se fundó el Hogar Escuela “La Providencia” de Villa Urquiza, localidad cercana a Paraná.
La llegada de las hermanas de Gante en nuestra ciudad de Chajarí, según relatos del Historiador Claudio Hermosa, sucedió de la siguiente manera.
“El padre Amil –radicado en Chajarí allá por 1919-, había gestionado ante las Hermanas Franciscanas de Gante de Paraná del Colegio Cristo Redentor, que envíen religiosas porque aquí estaba ausente la presencia de la Iglesia con una atención más directa hacia la mujer y hacia el rol social que las hermanas llevaban a cabo con los asilos”.
“Después de varias gestiones, en febrero de 1919 llegaron tres monjitas: Gilberta, Valentina y Wilfrides. Son las tres primeras hermanas que vinieron a Chajarí, eran belgas, llegaron a Paraná y de ahí fueron trasladadas a este lugar. Pero había que buscar un lugar donde ubicarlas, había que pensar dónde construir el asilo San José y ahí fue cuando el obispado tomó la decisión de levantar la comunidad franciscana donde hoy está la Parroquia María Auxiliadora. Era lógico porque la ciudad se venía corriendo hacia este lado, era un lugar ideal”.
“Ya con las hermanas en Chajarí, durante todo 1919 se realizó una campaña para reunir elementos para construcción del hogar o asilo. Se llamaba así porque, además de dedicarse a la educación, estaba el hogar para los chicos de menores recursos. Entonces el pueblo y la colonia comenzaron a colaborar donando todos los materiales que se necesitaban, pero había un solo inconveniente: la celebración de las misas tenían lugar en la Parroquia Santa Rosa y en esa época quedaba lejos”.
“Cuando ya se había reuniendo mucho material como para comenzar a levantar las paredes del hogar, sucedió algo inesperado: dos vecinas donaron sus terrenos que estaban en 9 de Julio y las vías, donde actualmente está el Colegio San José, para que se lo construya allí. Se llamaban Sara Casilda Mercader de Torrabadella y Maragarita B. de Siburu, eran dos feligreses del barrio Santa Rosa”.
“La gran ventaja era que estaba más cerca de la parroquia donde se celebraban las misas… Así, en 1920 se comenzó con la construcción del Colegio San José, empezó la escuela inicial, la escuela primaria y esa enorme misión que llevaron a cabo las hermanas en la región”.
(Fuente: Revista El Espejo)